El paro ya pasa una factura por $258 mil millones El transporte es el sector más afectado y la parálisis alcanza el 90 por ciento. El IPC de agosto se verá impactado al alza por las protestas.

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Con pérdidas superiores a los 150.000 millones de pesos, únicamente por concepto de fletes dejados de percibir, el transporte de carga por carretera encabeza la lista de los sectores más afectados por el paro nacional, que ya ajusta hoy 11 días.

Un reporte entregado por Fabio Sanín Berger, director de Colfecar en Antioquia, señala que las empresas transportadoras han dejado de movilizar más de 1,4 millones de toneladas de mercancías y que los conductores de unos 70.000 vehículos han visto afectadas sus operaciones, con especial rigor en Antioquia, Cundinamarca, Boyacá, Risaralda, Norte de Santander, Caldas, Cauca y Nariño.

Desde Defencarga y la Asociación de Transportadores de Carga (ATC) se asegura que la inmovilización del parque automotor de carga se ha incrementado paulatinamente con el correr de los días y ya alcanza el 90 por ciento.

En el segundo renglón de pérdidas por las protestas figuran los productores de papa y según Alejandro Esteves, representante de Fedepapa, se están dejando de comercializar 6.000 toneladas diarias del tubérculo, lo que ya suma más de 50.000 millones de pesos en pérdidas.

Por su parte, el presidente de Fenavi, Andrés Moncada Zapata, estima en 45.000 millones de pesos las pérdidas de los avicultores, básicamente, por productos que se ha dejado de entregar al mercado.

"Ese es un cálculo preliminar, porque hay aspectos que son difíciles de cuantificar. El puerto de Buenaventura, por ejemplo, está lleno y como no hay camiones para evacuar la carga, entonces hay buques fondeados allá, con costos altísimos. Tampoco sabemos cuánto valen los daños a los vehículos", explica el dirigente.

 

Más registro de pérdidas

El sector lácteo de Cundinamarca, Boyacá, Nariño y Caquetá, también ha sentido el impacto de las manifestaciones sobre sus ingresos.

Jorge Andrés Martínez, director Ejecutivo de Asoleche, califica como grave el hecho de que los ganaderos de esas regiones no puedan entregar la leche a la industria láctea e insiste en que diariamente se están dejando de recoger un millón de litros, con lo que las pérdidas suman 6.000 millones de pesos.

En Antioquia, Mariano Restrepo, presidente de la Federación Antioqueña de Asociaciones de Productores de Leche, comenta que el tema ha estado relativamente calmado, pero aun así se han perdido 1,5 millones de litros, por valor de 1.400 millones de pesos.

Restrepo advierte que de agudizarse las manifestaciones en el municipio de La Unión y en otras localidades antioqueñas, estarán en riesgo de perderse 2,5 millones de litros de leche y el ingreso y sustento de más 5.000 familias productoras del alimento.

La actividad porcícola reporta que la afectación es exponencial y Carlos Maya Calle, presidente Ejecutivo de Asoporcicultores, hace notar que sin transporte, ese sector podría colapsar en poco tiempo.

Las pérdidas de los porcicultores llegan a los 4.000 millones de pesos y las zonas más afectadas son Antioquia, Boyacá, Cauca, Caldas, Cundinamarca, Quindío, Nariño, Risaralda y Valle.

Entretanto, Ómar Acevedo Ramírez, vocero de la Mesa Nacional Cacaotera, sostiene que en Santander se han dejado de recoger unas 500 toneladas del grano, con pérdidas por unos 2.000 millones de pesos.

 

Impacto sin cuantificar

Sectores como el de los comerciantes, los exportadores y los arroceros también reconocen los efectos negativos del paro, aunque dicen desconocer la magnitud de la cifra de pérdidas y negocios dejados de hacer.

Guillermo Botero Nieto, presidente de Fenalco, menciona que las pérdidas de estas movilizaciones son gigantescas y es muy difícil precisar sus costos, pero recuerda que son toneladas de alimentos, productos y mercancías que no se pueden comercializar, con un valor de miles de millones de pesos.

El presidente de Analdex, Javier Díaz Molina, manifiesta que hay exportadores, principalmente de frutas y vegetales, que están muy perjudicados, que además de perder las producciones también sufren los efectos de incumplir los compromisos adquiridos con sus compradores en el exterior.

"En otros campos me han informado de algunos problemas en el tránsito de las mercancías que luego se han podido solucionar", añade el dirigente.

Rafael Hernández Lozano, presidente de Fedearroz, tampoco cuantifica el monto de pérdidas de los productores del cereal, pero reporta problemas serios en Casanare y Arauca, donde por falta de transporte no se ha podido evacuar la cosecha hacia Bogotá o Tolima para acabarla de procesar.

"Hay camioneros que no viajan por temor, otros por estar en paro y otros, por especular con los fletes y por eso le hemos pedido al Gobierno que solucione el problema. Además los arroceros no estamos en paro porque estamos recogiendo la cosecha", señala Hernández.

 

Golpe al bolsillo

En Medellín, el paro se ha traducido en aumentos considerables en algunos productos. En la Central Mayorista de Antioquia el kilo de arveja, que el mes pasado costaba 2.900 pesos, valía ayer 5.000 pesos; el kilo de pollo pasó de 3.150 a 4.600 pesos y la zanahoria de 600 a 1.150 pesos el kilo.

El encarecimiento de esos productos hará que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) aumente este mes. De hecho, los analistas económicos de Credicorp Capital incrementaron su expectativa de inflación de 0,14 por ciento a 0,19 por ciento para agosto, debido a los efectos que pueda tener el paro agropecuario sobre los precios de los alimentos.

Juan David Ballén, analista de Alianza Valores, considera que no hay motivo de alarma. "La inflación, así suba más de lo esperado en agosto, se mantiene controlada dentro del rango de meta establecido por el Banco de la República. Las presiones inflacionarias que generan el aumento de los precios de los alimentos es transitoria, una vez finalicen los paros, los precios se ajustarán nuevamente", dijo.

 

Fuente: El Colombiano

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