La deuda de los empresarios venezolanos con los exportadores colombianos asciende aproximadamente a 300 millones de dólares y, aunque hay retrasos en su pago, las autoridades de las dos naciones ya trabajan en un cronograma.

Ese fue uno de los puntos que se tocó en la reunión entre el ministro de Finanzas, Nelson Merentes y Mauricio Cárdenas, titular de Hacienda y Crédito Público de Colombia, quienes señalaron que buscan métodos para que el pago sea en moneda local.

Cárdenas anunció que el próximo 14 de agosto se reunirán en Caracas los equipos técnicos binacionales para evaluar la agilización de los pagos. “Se pretende que a los exportadores se les cancele directamente en pesos”.

En Colombia no esperarán a que culmine de cancelar la deuda para estudiar nuevos mecanismos de pago a futuro. “Se puede trabajar en paralelo. Sin embargo, el Sucre no está dentro de las alternativas”, desestimó Cárdenas.

De acuerdo con el funcionario colombiano se elaborará una lista con las necesidades prioritarias para que se cancelen primero los productos de los sectores con más requerimientos.

La reunión también abordó el tema del contrabando. Merentes aseguró que insistirán en la extracción de combustibles. “La presencia de un dólar paralelo contribuye al delito; deben corregirse todas las imperfecciones”, afirmó.

“Hay mucha especulación en la frontera y los cuerpos de seguridad deben evitar estas arbitrariedades. Si bien es sano que en una economía exista el intercambio entre personas de ambas naciones, las operaciones fuera del marco legal deben sancionarse”, remarcó Merentes.

Cárdenas también reconoció que el contrabando ha afectado a productos del sector agropecuario, pues ha impedido la creación de nuevos empleos.

El encuentro que se prolongó durante hora y media fue acordado el 2 de agosto pasado cuando los cancilleres de Venezuela y Colombia, Elías Jaua y María Ángela Holguín se reunieron en la Casa Amarilla.

Remesas se mantienen

El ministro de Finanzas, Nelson Merentes, apuntó que trabajarán en resolver las distorsiones generadas por el envío de remesas a Colombia con fines de obtener divisas. “Se mantendrá el envío de dinero, pero hay ciertas correcciones que deben asumirse”.

Mauricio Cárdenes, ministro de Hacienda y Crédito Público de Colombia, sostuvo que estas distorsiones no benefician a la nación vecina. “Si se puede cauterizar, se hará. Queremos que ambos pueblos tengan bienestar y una economía fortalecida”.

Fuente: El Nacional