Los 4 errores más comunes a la hora de contratar El reclutamiento de personal puede ser una decisión que haga la diferencia entre el èxito y el fracaso; apresurar el proceso podría ser un error muy costoso para la empresa

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Uno de los procesos más delicados dentro de una empresa y que desafortunadamente muchas veces se toma a la ligera, es la contratación de personal.

Una mala decisión en el reclutamiento de un profesional puede resultar seriamente costoso a una compañía no solamente en en cuanto a lo económico sino también respecto a la moral de todo un equipo, es por ello que la contratación debe tomarse con todo cuidado pues incluso, dependiendo del puesto que esté en juego, puede tratarse de una decisión que haga la diferencia entre el éxito y el fracaso.

Por supuesto, una empresa siempre debe apostar a la adquisición de nuevos talentos y jamás debe considerarlos un gasto sino como una inversión altamente redituable. Por ello en Jobomas te decimos cuáles son los errores más comunes en un proceso de reclutamiento para evitar que contrates a la persona equivocada y que ello pueda generar costosas pérdidas a tu negocio.

 

#1. Con prisa

Aunque la plaza vacante sea de vital importancia para la empresa debes tomar el tiempo necesario para asegurarte de que estás contratando a la persona adecuada para ocuparla. Toma en cuenta que para hallar el talento que requieres debes prestar atención a tantos perfiles como te sea posible y entrevistar cuidadosamente a cada aspirante. No apresures el proceso, recuerda que podrías estar afectando los intereses de tu empresa.

 

#2. “Más” no siempre significa mejor.

Otro error frecuente es contratar a un candidato con base en sus habilidades o en sus estudios sin asegurarnos de que sea el más apto para la empresa, para el puesto o incluso, para el clima laboral. Al contratar, “más” no siempre significa mejor. No importa si está más preparado, si es más inteligente, si es más rápido o más creativo, lo verdaderamente importante es asegurarte de que sea un profesional que puede alinear sus valores con los de tu empresa, si ama lo que hace, si tiene expectativas de crecimiento y motivación por el trabajo, si es compatible con las tareas que se le asignan y si puede empatizar con el resto de los colegas y trabajar en equipo.

 

#3. Sin pruebas

¿Le prestarías a alguien las llaves de tu auto sin asegurarte de que sabe manejar? Pues es el mismo caso. Si vas a poner tu empresa en manos de un profesional, deberías asegurarte primero de que sabe qué hacer con ella. Antes de extender un contrato puedes establecer periodos de prueba o mecanismos que te permitan evaluar si los candidatos son aptos para ocupar el empleo o si podrán adaptarse a los requerimientos de la compañía.

 

#4. A destiempo

Al contrario del primer punto, una regla de oro en el mundo laboral es corregir los errores en el menor tiempo posible para evitar que los daños sigan avanzando. Si un empleado de la compañía está ocasionando pérdidas a la misma por su mal desempeño, despedirlo cuanto antes puede ahorrarte muchos dolores de cabeza y por supuesto, costos innecesarios. Sé firme cuando se trate de obtener lo mejor para tu negocio y recuerda que si tu fuerza laboral es mediocre, tus ganancias también lo serán. Apuesta siempre por lo mejor para tu compañía.

 

Finalmente, te compartimos 4 claves para contratar en línea a los mejores profesionales y también te decimos cómo ofrecer vacantes irresistibles para a los grandes talentos. 

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