Es importante que seas consiente de lo que debes realizar al día siguiente, cuál es tu trabajo y qué tan eficiente eres, debes evaluar estos aspectos que pueden ser un obstáculo o por el contrario pueden ser un acierto para la productividad.

En Jobomas queremos compartirte algunos tips básicos para que puedas darte cuenta como reactivas tu productividad. Toma nota:

 #1. ¿Son útiles los hábitos que tienes?

El estado de equilibrio o la capacidad interna (de un sistema) para mantener una estabilidad, y que también se le conoce como “homeostasis” Para una empresa este equilibrio se refleja en las cosas que realizas y la manera ordenada en la que las llevas, que ya se volvieron una rutina en tu trabajo. Debes preguntarte ¿cuáles son los instrumentos y materiales que tienes a la mano? ¿Qué software no debe faltar en tu computadora? ¿En qué horarios te dedicas a enviar y responder correos? Cuando te das cuenta de que un cambio te rompe la dinámica significa que has sistematizado tu carga de trabajo. Evidentemente si no cuentas con las herramientas necesarias, (internet, celular, artículos de oficina) probablemente no puedas realizar tu trabajo de manera efectiva. Observa a detalle las acciones y las manías que tienes, después reflexiona e identifica la mejor manera de realizarlas, observa a tus compañeros para ver de manera más clara la situación.

#2. ¿Cuál es tu lugar de trabajo?

El lugar en el que te desarrollas puede influir en qué tan bien haces tu trabajo. El contexto que te rodea, las personas, las cosas, todo influye en cómo vas a utilizar tu tiempo, si quieres rendimiento y mejoras, ocúpate un poco en renovar tu espacio laboral, para hacerlo reflexiona sobre la facilidad para encontrar tus herramientas de trabajo, sobre la funcionalidad de las herramientas que tienes, si te motiva lo que tienes alrededor, todo esto para darte cuenta si tu contexto es negativo o positivo y qué tanto influye en tu productividad. Busca lo más cómodo, lo que pueda facilitarte e inspirarte en el momento en que realices tu trabajo.

#3. ¿Con quién inviertes tu tiempo?

Recuerda que las personas con las que convives más pueden influir en el buen o en el mal funcionamiento de tu productividad. Arriésgate, amplía tu contexto, haz nuevas relaciones de manera virtual pero sobre todo de manera personal, siempre estaremos expuestos a ser influenciados por nuestros amigos, es por eso que si te gusta pasar tiempo con las personas que tienen grandes ideas y sobre todo que apoyan tus metas, te verás contagiado y sobre todo esto se reflejará en tu vida personal. Recuerda a las últimas 5 personas con las que has pasado tu tiempo, empezando por el 5, y analiza qué tan benéfico ha sido para tu productividad, y el que quede en número uno (el que menos generó) debes evitarlo. Pasa más tiempo con lo que te generan más por un pequeño lapso de tiempo y verás cómo te generan acciones positivas.

Por último, también te recomendamos aplicar los 4 hábitos del profesional saludable y exitoso y te decimos cómo es que dedicarte tiempo a ti mismo puede ser la clave de la productividad.

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