Cómo elaborar un currículum Aprende a presentarte como todo un profesional y a convertirte en el candidato idóneo

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Si estás en la búsqueda de empleo, lo primero en lo que debes hacer es elaborar un buen currículum que te permita presentarte ante un reclutador como el candidato idóneo para su empresa.

 

Se calcula que por cada vacante emitida se reciben cerca de 200 postulaciones a las que los encargados del proceso de contratación, les dedican alrededor de 10 segundos de lectura. Por ello es tan importante que desde el primer segundo, provoques una buena impresión y concentres la atención de tu entrevistador en tus puntos más fuertes para que ello lo motive y lo convenza de que tú eres el indicado para el empleo.

 

Para lograr tu propósito, te damos algunos tips sobre lo que debe y no debe incluir un Currículum Vitae:

 

1. Estructura.

Existen tres maneras de presentar un currículum: Cronológica (o cronológica inversa), Funcional y Mixta.

 

- Cronológico: La información se organiza por fechas, ya sea de lo más reciente a lo más antiguo o viceversa (Inversa) si lo que se quiere es resaltar la evolución que se ha tenido. Es la forma más común de presentar un CV, sin embargo, no es conveniente para aquellas personas que han dejado de laborar por largos periodos de tiempo o que cambian de empleo con frecuencia.

- Funcional: Distribuye la información por temas, logros, funciones, sector o aquello que quieras destacar. La ventaja de este formato es que lo cronológico pasa a un segundo plano y te permite enfatizar los puntos positivos; la desventaja es que es no es tan sencillo de redactar.

- Mixto: Es una combinación de los dos anteriores. La información debe organizarse de forma funcional en primer lugar para destacar los aspectos positivos y posteriormente, de manera cronológica. 

 

2. Puntos Básicos

Hay información fundamental que siempre debes incluir en tu currículum:

- Nombre

- Edad o fecha de nacimiento

- Datos de contacto: dirección, teléfono particular o celular, correo electrónico.

- Formación académica: el grado de estudios más reciente, el título obtenido y el nombre de la institución

- Formación profesional: empleos anteriores, cursos, talleres y actividades extracurriculares.

- Idiomas

- Uso de software y otras herramientas relacionadas con tu actividad.

 

Recomendaciones de presentación:

 

- Se objetivo, breve y organizado. Destaca tus habilidades; si tienes amplia experiencia laboral elige sólo lo más importante y distribúyelo de manera que sea fácil de leer pero en secuencia lógica. No excedas de dos páginas.

 

- Cuida la presentación. Debe estar diseñado en PC, con una tipografía fácil de leer y de buen tamaño, en papel de calidad (no necesariamente blanco, puede ser en tonos amarillos o azules discretos) y siempre conservando orden y limpieza.

 

- Demuestra creatividad. Busca algo fuera de lo convencional (currículums en procesador de texto) y no dudes en mostrar tu originalidad. Ser creativo llamará la atención de tu entrevistador y demostrará tu interés por ser sobresaliente y prestar atención a los detalles.  Utiliza elementos de tu carrera o de tu sector para la presentación.

 

- Se descriptivo. Proporciónale a tu entrevistador los elementos importantes de los empleos y responsabilidades que has tenido. Destaca todo aquello que pueda interesarle a su empresa para contratarte.

 

- Cuida la ortografía y la redacción. Uno de los principales motivos por los que descartan a un aspirante, son las fallas de redacción u ortografía en su currículum pues denotan su falta de profesionalismo e interés en su imagen laboral. Usa frases cortas y  palabras sencillas, pero siempre bien escritas. Evita expresiones rebuscadas o redundantes o los términos especializados si el puesto no lo amerita.

 

- Ofrece un plus. Incluye los idiomas que dominas y el porcentaje en que lo haces, paquetería o software, algunas herramientas o maquinaria que sabes utilizar. Ofrece todas tus capacidades y toda tu preparación.

 

- Muestra seguridad. La presentación del CV y la forma de escribir reflejan la confianza que tienes en ti. Antes de elaborarlo analiza todos tus puntos fuertes, tus logros y tus aciertos; luego organízalos de manera que tu entrevistador vea lo mejor de ti. Recuerda que ser redundante es sinónimo de inseguridad así que evítalo a toda costa.  

 

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